Toño Franco se aprovecha de su puesto y amistad con altos mandos de MORENA para acomodar a familiares y amigos en la política.
– La misma candidata a la presidencia municipal de su partido Ymelda Martínez señala que le pidió regidurías de gratis.
– El delegado distrital de los programas del bienestar también pide regidurías y puestos de trabajo en Moroleón y Uriangato, aprovechando su amistad con grandes figuras estatales del partido y la misma presidenta Adriana Guzmán.
Yuriria, Gto.- Uno de los principales culpables de que Morena en el pueblo mágico se esté desmoronando es el conocido delegado distrital de los programas de apoyo federal del Bienestar, Toño Franco, quien aprovecha sus amistades con altos líderes del partido en Guanajuato para exigir regidurías y puestos en los municipios del sur.
Toñito se siente con el poder de mover las piezas del ajedrez en la política regional, pues hasta a sus familiares y amigos ha colocado en puestos federales con una soberbia por la que ya todos los militantes del partido en Yuriria lo conocen y muchos por eso lo desprecian.
El delegado regional es muy amigo del diputado federal Pedro Ortega, quien parece que le enseñó muy bien todas las formas de corrupción y nepotismo que existen, el peor político del que se tenga recuerdo en el distrito X de Guanajuato, que dicho sea de paso, las cientos de denuncias que tiene en su contra le valieron más bien para ganarse una senaduría plurinominal.
La uriangatense Adriana Guzmán, presidenta del comité directivo estatal, es también muy allegada a Antonio, por eso a este personaje de la política local le importa muy poco que la militancia de su propio partido lo denuncie en las altas esferas de Morena, pues hasta podrían premiarlo con un puesto mejor al que tiene hoy en día.
Como en Yuriria Ymelda Martínez, que es la candidata oficial a la presidencia municipal del pueblo, le negó las dos regidurías que le pedía, Toño Franco hizo un berrinche digno de una expareja ardida y con mucho coraje, empezó a pagar a los medios publicaciones falsas en contra de su propia candidata del partido.
Pero esto no se acaba ahí, porque Franco aprovechó su amistad con los grandes líderes de Morena de todo el estado, para poder presionar a sus colegas en Moroleón y Uriangato para pedirles mínimo una regiduría en el ayuntamiento, de las primeras por si esto no fuera suficiente.
Tanta es la presión de Toño en Moroleón y Uriangato con amenazas de que es amigo de grandes políticos del estado, que las dirigencias de estos municipios no tuvieron otra opción que dejarle “apartada” una regiduría en cada ciudad, pero también pidió algunas direcciones para sus familiares y amigos si es que Morena logra la hazaña de ganar la presidencia de Moroleón, Uriangato o de ambas.
Así se las gasta solo una de las variadas fichitas que tiene Morena en sus filas yurirenses, pues hay problemas de todo, entre grupos, divisiones, dimes y diretes, hasta desbancada de militantes a otros partidos, eso que esto apenas está empezando.