El NEPOTISMO es uno de los vicios más arraigados en el ámbito gubernamental; consiste en favorecer a familiares o amigos otorgándoles cargos o empleos públicos por el mero hecho de serlo, sin tomar en cuenta otros méritos.
Esta práctica es un eslabón más en la cadena de la corrupción y un acto vil habitual de quienes ostentan el poder; es un medio común para destrabar «negociaciones» y PAGAR favores políticos o deudas económicas.
En lugares como nuestro Yuriria es más fácil detectar este modus operandi debido al reducido volumen poblacional que nos hace a todos plenamente identificables y por lo tanto los lazos familiares o de amistad son muy visibles.
En los casos normales (por mal llamarlos de algún modo) los beneficiarios del NEPOTISMO prestan sus servicios al gobierno, siquiera actúan en él. Los más cínicos (o inútiles) son los conocidos «Aviadores» y «Asesores», infaltables en cada Administración Municipal.
Sería interminable mencionar a quienes otorgaron o recibieron un empleo público en estas circunstancias a lo largo de los diferentes gobiernos locales. Los «Rangeles», los «Gaviñas», los «Gómez» o los «Torres» son solo algunos, a cada gobernante lo acompaña su clan.
En TODAS las Administraciones ocurre esto, las vuelven negocios familiares o clubes de amigos, alimentando así a la corrupción, al influyentismo, al robo y al mal ejercicio público por medio de estas redes de complicidades y amaños.
Ya es tiempo de hacer las cosas bien y privilegiar la CAPACIDAD y HONESTIDAD en la elección de los servidores públicos.
Su amigo Juan P. Facebook