Estefanía, una de las víctimas de mujeres policías de San Miguel de Allende, muestra severas lesiones en rostro y cuerpo.
San Miguel de Allende, Gto.- Las dos mujeres y dos hombres que fueron golpeados por policías municipales en San Miguel de Allende, Guanajuato, ya interpusieron denuncias ante el Ministerio Público y ante la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guanajuato por las agresiones recibidas la madrugada del domingo.
Por su parte el ayuntamiento de San Miguel suspendió a los 4 elementos que participaron en la trifulca.
“Por eso desde que nos enteramos que había esa ofensa con los ciudadanos, esta violación a sus derechos humanos di la instrucción para que fueran separados de sus cargos de inmediato y que se inicie un procedimiento que la ley marca para iniciar las investigaciones y posteriormente ser dados de baja de la corporación”, dijo Mauricio Trejo, alcalde de San Miguel de Allende.
Las autoridades municipales argumentaron que la intervención de los agentes fue porque minutos antes se había registrado una riña en la que agredieron a una mujer policía, sin embargo, los agraviados negaron todo.
“No hay ninguna prueba, de hecho, en los negocios hay cámaras afuera, donde si se pudiera comprobar toda esa información, comprobar esa realidad, sería lo más coherente”, comentó Andrik García, hermano de una de las víctimas.
Estefanía es una de las dos mujeres que fueron golpeadas. Ella muestra golpes visibles en el rostro y se mueve con mucho dolor.
Incluso le tuvieron que tomar su declaración sin bajarse de la camioneta de su padre.
“A mí el principal golpe fue en la cara, desde ahí me azotaron en el piso, o sea a mí de la nada me jalaron del piso y me azotaron en el piso, después de la nada otro oficial me empezó a dar patadas en la cara y a mis compañeros”, refirió Estefanía.
Ella acusó a los uniformados de excederse en el uso de la fuerza cuando no era necesario.
“A mi compañera si la descalabraron, estaba sangrando, a otro compañero también estaba sangrando a más no poder”, indicó.
Lo más indignante para ella es que las uniformadas que participaron en la golpiza no tuvieron ninguna contemplación con ella.
“Una mujer me golpeó, se supone que debemos estar unidas, y una mujer me golpee, no se vale”, sostuvo.
Ahora sólo esperan que se haga justicia y se castigue a los responsables.